Mirando pa otro lado

De repente la vida se pone tan rápida, es como cuando estas en el mar, tranquilo flotando, pero de repente te pesca una ola te da vueltas, te pegas se te cae un poco el traje de baño te raspas, sabes que no morirás, pero el susto te lo llevas igual.
Es como un poco así lo que siento hoy.

La semana pasada comenzaron a suceder cosa que no son menores, son cosas que cambian la conformación actual de mi vida, que me van a dejar parada mirando para otro lado. No son cosas malas, en ningún caso, pero si son cosas que rompen el estado de calma en que estabas, tienes que tomar decisiones, tienes que sentir emociones, en otras palabras tienes que vivir.

Es rarísimo ver lo positivo de las cosas y aun así, pensar “hay que miedo, por que a mi, porque ahora”, creo que debe ser por que nos damos cuenta que detrás de una gran oportunidad inesperada que puede ser súper buena, se nos obliga un poco a dejar algunas cosas que no pensábamos dejar por nuestra propia voluntad. Cosas que queremos y lo más doloroso gente a la que nos hemos entregado con todo el corazón.

Al fin y al cabo hay que celebrar todo es por amor y para mejor cuando el timón no esta en nuestras manos.

Tu lo sabes todo, tu ya sabes que es lo que me duele, si eso es lo que quieres yo te doy mi si y te agradezco por acordarte de mi.
Gracias por lo que me diste y hoy te llevas, confió que es por que me amas, no puedo creer en otra cosa, no lo soportaría.